La redirección 301 es uno de los aspectos fundamentales en el SEO, aunque también uno de los más desconocidos.
Por todos es sabido que una redirección consiste en dirigir (valga la redundancia) a los usuarios que teclean un dominio a otra web diferente o bien a una zona de la web en concreto. Algo así como el clásico desvío telefónico.
Sin embargo, ¿para qué sirve la redirección 301?
Tipos de redirecciones:
Cuando el robot de Google rastrea una página web con sus algoritmos, puede encontrarse con dos tipos distintos de redirecciones:
- Las redirecciones temporales, son aquellas que el robot de Google entiende que no se trata de un cambio definitivo, sino de una opción momentánea por algún motivo, como la instalación de un nuevo servidor, una actualización… La idea es que acabe deshaciéndose. Estas son las redirecciones 302. En este caso, Google mantendrá ambas direcciones en el buscador con la misma relevancia.
- Las redirecciones permanentes son las 301. En este caso, el robot de Google interpreta que se trata de un cambio definitivo. Es decir, la dirección www.ejemploa.es siempre redirigirá a www.ejemplob.es. Por tanto, en este caso, el buscador minimizará la presencia de ejemploa.es en los buscadores y otorgará toda la relevancia posible a ejemplob.es, que considera la web principal.
Hacer una redirección 301 paso a paso
Para llevar a cabo una redirección 301 hay que entrar en el fichero donde está alojada nuestra página web en nuestro hosting y buscar el archivo .htaccess, que está en la dirección raíz principal. Se puede abrir con cualquier editor de texto, como el propio que tiene el administrador (si estamos entrando directamente desde el panel de control de nuestro servidor). Si lo hacemos por FTP, se puede abrir con el bloc de notas.
Ni que decir tiene que, antes de editar nada en el .htaccess, deberías hacer una copia de seguridad del archivo. Nunca se sabe qué podemos tocar, así que descarga la versión sin editar a tu ordenador y guárdala a buen recaudo por si pasa algo y hay que volver a subirla.
Una vez dentro, hay que añadir unas líneas de texto al final para conseguir que una dirección redirija a otra. Podemos hacer una redirección a una página, a un directorio, a un dominio, de http a https… Estas son todas las opciones:
Redireccionar una página, directorio o categoría en tu web
La solución para mover contenido de una página, si se ha eliminado una dirección (por un cambio de CMS, por ejemplo) o se quiere cambiar el nombre a la URL.
Redirect 301 /paginaantigua http://www.tupagina.es/paginanueva
Este mismo redireccionamiento puede hacerse también con categorías o directorios, incluso múltiples, por ejemplo:
Redirect 301 /categoriaantigua/subcategoriaantigua http://www.tupagina.es/categorianueva/subcategorianueva
Redireccionar un dominio
Si te interesa tener varios dominios que lleven a una misma página web o bien prefieres cambiar el que tienes por otro diferente, la fórmula es muy parecida:
Redirect 301 / http://www.tupagina.es/
Redireccionar una IP
Puede que un buscador indexe una réplica de tu sitio para la IP del servidor. Para redireccionarla a tu hosting, poniendo de ejemplo la IP 192.168.0.0 (puedes buscar la IP de tu servidor en SpyOnWeb.com.
<IfModule mod_rewrite.c>
RewriteCond %{HTTP_HOST} ^192\.168\.0\.0
RewriteRule (.*) http://www.tupagina.es/$1 [R=301,L,QSA]
</IfModule>
Redireccionar de NO-www a WWW (y viceversa)
Es posible que Google te haya dado un toque de atención porque tienes dos versiones de tu página web, la clásica con tres www y una sin ellas (www.tupagina.es y tupagina.es). En este caso, lo primero que tienes que hacer es decidir cuál quieres que sea tu dirección exacta, ¿con www o sin ellas?
<IfModule mod_rewrite.c>
RewriteCond %{HTTP_HOST} ^tupagina.es [NC]
RewriteRule (.*) http://www.tupagina.es/$1 [R=301,L,QSA]
</IfModule>>
<IfModule mod_rewrite.c>
RewriteCond %{HTTP_HOST} ^www.tupagina.es [NC]
RewriteRule (.*) http://tupagina.es/$1 [R=301,L,QSA]
</IfModule>
Redireccionar de http a https (o al revés)
Uno de los factores que influyen al posicionamiento web es que tu página web tenga una versión con seguridad SSL. Si acabas de contratar el certificado, necesitarás hacer una redirección 301 desde las páginas http a las nuevas https. No obstante, esto no es tan secillo. Si has conseguido que tu página, con sus URLs http tengan un posicionamiento web poderoso, con buena presencia en los rankings, ¿merece la pena dar el salto a nuevas URLs con https que hay que posicionar casi de cero? Quizás no.
<IfModule mod_rewrite.c>
RewriteCond %{HTTPS} off
RewriteRule (.*) https://www.tupagina.es/$1 [R=301,L,QSA]
</IfModule>
<IfModule mod_rewrite.c>
RewriteCond %{HTTPS} on
RewriteRule (.*) http://www.tupagina.es/$1 [R=301,L,QSA]
</IfModule>
Redireccionar páginas con una barra al final (/)
Es un caso parecido al que ocurre con las dos versiones de tu página web con www y sin ellas. En este caso, puede producirse que haya dos versiones de una misma página, una que acaba en / y otra sin ella (tupagina.es/articulo/ y tupagina.es/articulo).
<IfModule mod_rewrite.c>
RewriteCond %{REQUEST_FILENAME} !-f
RewriteCond %{REQUEST_URI} !(.*)/$
RewriteRule (.*) http://www.tupagina.es/$1/ [R=301,L,QSA]
</IfModule>
<IfModule mod_rewrite.c>
RewriteCond %{REQUEST_FILENAME} !-d
RewriteRule (.*)/$ http://www.tupagina.es/$1 [R=301,L,QSA]
</IfModule>
Beneficios de una redirección 301
La mejor manera de ‘ganar puntos’ en los motores de búsqueda a través de una redirección 301 ocurre cuando se redirige una web de una temática concreta a otra de la misma que tiene autoridad y Google ve con buenos ojos.
En estos casos, los resultados son muy beneficiosos no solo para la página de destino, también para la que redirige.
Los resultados de una redirección 301 tardan en notarse aproximadamente una semana, tanto en las búsquedas como en el tráfico web. En caso de que se trate de un redireccionamiento muy fuerte, entre sitios con muchísimo contenido o muchos enlaces, puede que no haya beneficios hasta pasadas más de 10 semanas.
Posibles problemas de una redirección 301
No siempre hacer una redirección 301 trae resultados positivos. En algunas ocasiones puede que nos haga perder posiciones en los buscadores, lo que se conoce como link juice.
Sucede, por ejemplo, cuando hacemos una redirección de un dominio que tiene una temática concreta hacia otro que no tiene nada que ver. En ese caso, Google se dará cuenta y pensará que estamos haciendo prácticas poco éticas, por lo que nos penalizará.
Puede darse el caso de que el redireccionamiento sí se sea hacia una página de la misma temática, pero si ésta última no tiene el suficiente link juice, tiene algunas penalizaciones o está cerca de serlo, acabaremos siendo perjudicados tarde o temprano en las búsquedas.
Qué hacer para no ser penalizado por una redirección 301
Todas las acciones SEO que llevemos a cabo serán miradas con lupa por los diferentes algoritmos de Google tarde o temprano. Si alguna de ellas puede dar lugar a equívocos o confundir al motor de búsqueda, quizás nos encontremos algún problema, como los que acabamos de ver arriba.
A la hora de hacer una redirección 301 hay que tener en cuenta muchos pasos a seguir para no dejar ningún cabo suelto. Por ejemplo, si redireccionamos de un dominio a otro y queremos que todo el contenido que teníamos en el primer dominio utilice ahora el nuevo, hay que gestionar la estructura completa de todas las URLs para evitar que surjan los temidos errores 404, de los que Google nos dará buena cuenta en Search Console.
Estos fallos son los que muestra una página cuando la URL no coincide, ya que no existe o ha sido eliminada. Si además hablamos de páginas web grandes o con varios años de trabajo, podemos encontrarnos con miles de errores de este tipo, algo catastrófico en términos de SEO.
Es conveniente vigilar el estado de nuestro perfil de anchor text, puesto que al hacer una redirección 301 nuestro perfil de enlaces crecerá. Según el tipo de redirección llevada a cabo podemos tener dos resultados diferentes, uno positivo, con un perfil de enlaces poderoso y totalmente funcional; o bien provocar una sobredimensión que llamará la atención de Google Penguin y nos acabará costando una sanción.
Esto último puede darse si abusamos de los anchor text de los enlaces que llevan a nuestra web, es decir, del texto ancla que usamos para colocar un link a nuestro sitio. Esto es muy común cuando intentamos posicionar varias palabras clave y nuestros anchor texts son exactamente esas palabras.
También podemos ser penalizados si hacemos demasiadas redirecciones 301 con los mismos criterios por los que Google acaba penalizando el link building. Si tenemos muchos dominios o muchas páginas diferentes redirigiendo a la nuestra, al final los algoritmos de Google acabarán detectando lo que consideran una práctica abusiva y nos pasará factura en los rankings, haciendo que nuestro portal pierda fuerza y autoridad.
Existen algunas fórmulas concretas que nos evitarán penalizaciones y nos ayudarán a sacar el máximo partido posible a las redirecciones 301:
Unificar fuerzas entre portales
Una de las estrategias de marketing digital más extendida es crear varios blogs o páginas de una misma temática con la que apoyarnos mutuamente.
Por un lado tenemos nuestra página web principal y por otro, una serie de sitios ‘satélite’ que nos apoyan, con los que intercambiamos enlaces, tráfico y que están bajo nuestro control.
Sin embargo, puede que estos portales no cumplan como esperábamos y su funcionamiento no nos esté reportando los resultados en cuanto a posicionamiento que esperábamos en un principio, o al menos, no uno que nos compense.
En ese caso, una buena opción es aprovechar que se trata de páginas web limpias y sin problemas para redireccionarlas hacia nuestra página web principal, lo que supondrá un gran avance en los rankings.
La táctica de las micro-webs de nicho
Es muy similar a lo que acabamos de ver con los portales bajo nuestro control. En este caso, se trata de aquellas páginas web o blogs que hemos tenido en algún momento y cuyas visitas eran muy limitadas, o bien estaban centradas en temas muy concretos, por lo que no nos pueden ayudar demasiado a la hora de mejorar nuestra autoridad web.
Sin embargo, sí podemos aprovecharlos haciendo que cada una de estas pequeñas páginas sea redireccionada a una sección concreta de nuestra web principal. El tráfico acabará en nuestro sitio y el posicionamiento acabará afectando a nuestro dominio, sin que haya riesgo alguno.
Redirigir dominios caducados a nuestra web
Es una de las más efectivas y mejor vistas por Google. Si nos hacemos con dominios que hayan caducado (porque su web ya no exista o ya no tengan uso) pero dispongan de enlaces poderosos y de una temática igual a la de nuestra página web, podemos redireccionarlos a nuestro portal y aprovechar al máximo su link juice con un 301.
Solucionar penalizaciones con una redirección 301
Hemos visto cómo podemos ser penalizados con una redirección 301 y también qué tenemos que hacer para no ser castigados por Google en estos casos. Sin embargo, ¿qué ocurre cuando ya hemos sido castigados con antelación? Que una redirección 301 puede ser la solución que estábamos esperando.
Uno de los ejemplos más evidentes es una penalización por parte de algún algoritmo de Google hacia uno de nuestros dominios.
Para conseguir retirarla y recuperar nuestro poder en los buscadores, tendremos que hacer una limpieza exhaustiva de nuestro perfil de enlaces al completo y esperar a que el mismo algoritmo que nos ha castigado vuelva a analizar nuestro sitio y compruebe que todo esté bien.
Con una redirección 301 esto puede ser mucho más rápido. Una vez limpiado el perfil de enlaces, en lugar de esperar a que el algoritmo corrija su penalización, podemos redireccionar el dominio a otro limpio que tenga el mismo link juice. Al no tener penalización, no será necesario esperar, automáticamente estaremos totalmente ‘libres’.
Otra táctica para estos casos, algo más rebuscada, es hacer una doble dirección. Es decir, redirigir desde el dominio penalizado a uno caducado y desde éste último, a uno completamente nuevo.
Así, el perfil de enlaces del dominio antiguo y el caducado se combina y trabajan para el dominio nuevo, dando un empujón extra.
Unificar varias landing page
Si trabajamos con Google Adwords, es posible que tengamos varias landing page posicionadas con términos o palabras clave que nos funcionan muy bien, pero que promocionan productos muy similares o los mismos servicios.
Por ejemplo, podemos tener una landing page para ‘videojuegos de carreras’ y otra para ‘videojuegos de acción’.
Si unificamos ambas con una redirección 301, todo el tráfico que genere cada una con sus palabras clave determinada podremos transferirlo a una página concreta, como puede ser la categoría de videojuegos en general.
Sumar más contenido para tu página web
Es posible que la única manera que nos quede para ganar peso en Google sea a través de generar contenido. Si no tenemos las suficientes entradas para ser una página web con autoridad y queremos lograrlo con relativa velocidad, podemos contratar a un redactor y que se ponga a trabajar a destajo, o bien optar por una solución más barata.
Se puede hacer una redirección de una web más grande que la nuestra para lograr ampliar el contenido. Como éste ya tiene poder en Google, está indexado y posicionado, aumentaremos nuestro link juice y daremos un importante salto en los rankings de los motores de búsqueda.
Comprar un dominio superior
Puede que nada de esto funcione, o al menos, no al nivel que necesitamos. En casos extremos, si necesitas batir a tus rivales y has probado todo, puedes intentar comprar algún portal de la competencia que tenga una fuerza similar a la tuya. Si estás en la segunda página de una búsqueda de Google y quieres dar el salto a la primera, puedes intentar adquirir otro sitio que esté también en la segunda, en una posición similar.
Con una redirección 301 desde su dominio, que ahora será tuyo, toda la fuerza y la autoridad que esa web ha generado acabarán sumándose a tu página, lo que te ascenderá rápidamente en el ranking. Es una medida algo desesperada (y puede ser bastante costosa), pero sus resultados son inmejorables.
Cuántas redirecciones 301 pueden utilizarse en un dominio
No hay un número exacto, aunque sí se pueden sacar conclusiones. Y la más básica es que no es conveniente abusar de las redirecciones 301, porque Google puede considerarlo una práctica abusiva y hundirnos en sus rankings.
Como hemos visto anteriormente, hay que vigilar la autoridad de los sitios que redirigimos, pero también su antigüedad y su indexación. Crear una página web de cero y que ya tenga varios dominios con redirecciones 301 hacia ella harán saltar las alarmas, por poner un ejemplo.
Siempre hay que recordar que la redirección 301 tiene mucha más importancia de la que pueda parecer a primera vista y que puede terminar resultando un elemento clave en el trabajo de SEO y posicionamiento.
Por ello a la hora de utilizarla hay que asegurarse de hacerlo de una manera conveniente y sin fallos que nos puedan ocasionar problemas a corto y sobre todo largo plazo.